Locos por los dulces.
En el pasado, el exceso de peso era menos común y de las personas que lo tenían, la mayoría era porque consumían muchas grasas y harinas habitualmente. Hoy, la mayoría de la gente con sobrepeso y diabetes tipo 2, debe sus kilos de más y su enfermedad al consumo excesivo de azúcar.
El consumo de azúcar, aumentó tanto en los últimos cien años que generó un caos nutricional en el mundo: legiones de personas con sobrepeso mórbido y a la vez, mal alimentados. Incluso en países como china, la cifra de los casos de diabetes y prediabetes se ha disparado, como consecuencia de la occidentalización de la dieta de los chinos.
El exceso de carbohidratos en la dieta, tiene muchos responsables pero dos, son los más importantes. Primero, la mayor disponibilidad, no sólo el azúcar de caña propiamente dicho, sino de todos los dulces posibles. Gaseosas, golosinas y alimentos enlatados, casi inexistentes en la dieta allá por el 1900, hoy son cosas de todos los días.
Segundo: el azúcar genera adicción. Su consumo genera que el organismo pida más, que sufra cuando bajan los niveles de azúcar. Como además el sabor dulce se asocia emocionalmente a la nutrición materna, los psicólogos afirman que muchas veces , la ansiedad y los conflictos favorecen el consumo de azúcar como compensación. En algunos casos de depresión también se produce un aumento del deseo de consumir alimentos dulces.
Fuente: Diario de la salud.
Gráfico:losproductosnaturales.com
En el pasado, el exceso de peso era menos común y de las personas que lo tenían, la mayoría era porque consumían muchas grasas y harinas habitualmente. Hoy, la mayoría de la gente con sobrepeso y diabetes tipo 2, debe sus kilos de más y su enfermedad al consumo excesivo de azúcar.
El exceso de carbohidratos en la dieta, tiene muchos responsables pero dos, son los más importantes. Primero, la mayor disponibilidad, no sólo el azúcar de caña propiamente dicho, sino de todos los dulces posibles. Gaseosas, golosinas y alimentos enlatados, casi inexistentes en la dieta allá por el 1900, hoy son cosas de todos los días.
Segundo: el azúcar genera adicción. Su consumo genera que el organismo pida más, que sufra cuando bajan los niveles de azúcar. Como además el sabor dulce se asocia emocionalmente a la nutrición materna, los psicólogos afirman que muchas veces , la ansiedad y los conflictos favorecen el consumo de azúcar como compensación. En algunos casos de depresión también se produce un aumento del deseo de consumir alimentos dulces.
Fuente: Diario de la salud.
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