viernes, 21 de noviembre de 2014

La dieta vegetariana detiene la diabetes (parte 2).

Lista amarilla.

En la segunda etapa, se incorporan gradualmente los alimentos de la lista amarilla, que son alcauciles, arvejas, batatas, berenjenas, calabaza, nabo, remolacha, tomate y zanahoria. Se agregan también frutas, como el ananás, los arándanos, las cerezas, ciruelas, coco, damascos y duraznos, frutillas y franbuesas, higos, kiwi, mangos, naranjas, melones, papaya, sandía, pomelo y uvas.

Pueden usarse las semillas de girasol, calabaza, cereales, como el amaranto, la cebada perlada, mijo y quinoa, algunos superalimentos como la espirulina, la maca, las bayas de goji, las granadas, el polen de abeja, el noni. También se incorporan huevos.

La propuesta es ir pasando del 100% verde y 10% amarillo y subir la ingesta de estos últimos hasta un 70% verde y 30% amarillo.

Lista roja.

Por último, se incorporan los alimentos de la lista roja pero solo en un rango de un 5 a un 20 por ciento del total que se consume en el día.

En la lista roja están las frutas muy dulces como la banana, caqui, cereza, membrillo, mora y pera. Entre las desecadas, ciruelas, dátiles, higos y pasas de uva. Arroz, avena y trigo en sus diversas presentaciones integrales, legumbres como lentejas, arvejas, garbanzos y porotos aduki. Las harinas y féculas se mantienen en muy popca cantidad por su alto índice glucémico.
Fuente: Diario de la Salud.
Gráfico: sinmordaza.com

miércoles, 19 de noviembre de 2014

La dieta vegetariana detiene la diabetes (parte 1).

Un plan paso a paso.

Se desaconsejan las carnes, la leche y los edulcorantes artificiales, así como las harinas refinadas, las golosinas, lo snacks comercial y los productos procesados "porque no aportan ningún  beneficio". También se propone un consumo mayoritario de alimentos crudos, desecados o fermentados. Pero se aclara que todo el cambio comienza en la mente, por lo que es fundamental no solo informarse sino prepararse adecuadamente y planificar esta modificación alimentaria. 

Tiene tres etapas.

En la primera, junto a rutinas de desintoxicación y limpieza del organismo, se consumen solo alimentos en la lista verde, preferiblemente crudos.

El tiempo que se mantiene cada etapa, tiene que ver con lo que marcan las mediciones y el estado general de cada paciente, quien debe estar supervisado por un profesional. "Ese es un juego que queda abierto al sentido común, al paciente y al profesional que lo trate, porque cada persona responde de manera diferente a estos enfoques, diseña las estrategias utilizando recursos diferentes. Hay personas que normalizan sus índices de glucemia, en cuatro días y hay otras que tardan unas semanas.

Lista verde.

Esta onda verde se compone de acelga, brotes de cualquier semilla, espinacas, rúcula, hojas de zanahoria, remolacha y rabanitos, repollo chino o pakchoy, apio, brócoli, cebolla, coliflor, espárragos, jenjibre, limas, limones, morrones, palta, pepinos, rabanitos, repollos y zucchinis. También se pueden consumir algas, hongos frescos, aceites de girasol,chía, coco, oliva, lino y otros, siempre en crudo.

Semillas como almendras, alpiste, avellanas, nueces, pistachos, lino siempre remojadas por varias horas para que se "activen"; harinas de algarroba y cacao, así como los alimentos fermentados hechos en casa como el chucrut, el kefir, el miso, el kimchi, quesos de frutos secos y vinagre de manzana; infusiones de hierbas libres de cafeína, té blanco y verde, para endulzar stevia y para salar, sal marina o de roca.
Fuente Diario de la Salud.
Gráfico: saludparahoy.wordpress.com

sábado, 15 de noviembre de 2014

Tomate, el vegetal multiuso.

Nadie tiene dudas acerca de que las hortalizas son ingredientes indispensables para una alimentación sana y natural y, por esa razón están presentes en las mesas de todo el mundo. De muy diversos orígenes, pero de valores nutricionales parecidos, la mayor parte del peso de estos sabrosos vegetales se debe al agua que contienen (entre un 70 y un 95 por ciento). Sin embargo, nos suministran una amplia gama de vitaminas y elementos minerales, además de una notable cantidad de fibras dietéticas que estimulan las funciones digestivas.

El principal valor nutritivo de las hortalizas es su elevado contenido de vetacarotenos (precursor de la vitamina A), ácido ascórbico (vitamina C) y ácido fólico, sobre todo si se las compara con los cereales, que carecen de estos factores. Por eso cumplen una importante misión en la alimentación, al equilibrar las deficiencias de otros grupos de alimentos. Dentro del conjunto de las hortalizas, el tomate, es el producto más popular y utilizado en la cocina diaria.

Efecto sobre la diabetes.

Los tomates son una buena fuente del mineral llamado cromo. Se ha demostrado que el cromo puede ayudar a los pacientes diabéticos a mantener sus niveles de azúcar en la sangre bajo control. Una taza de tomate proporciona 7,5 por ciento del valor diario recomendado para el cromo. El jugo de tomate también ofrece beneficios especiales a los pacientes con diabetes tipo 2 que tienen un mayor riesgo de enfermedad cardiovascular. Cuando la salud de los vasos sanguíneos se altera, como es el caso de la diabetes, las plaquetas (las partes de la sangre responsable de la preservación de los vasos sanguíneos sanos) se adhieren a la mucosa de la pared del vaso, que, con el tiempo, puede conducir al desarrollo de las enfermedades cardiovasculares.

El tomate por su bajo contenido en hidratos de carbono, bajo índice glucémico (15) y variedad de preparaciones y platos para incluir en la alimentación es una verdura muy recomendada para el menú diario de las personas con diabetes.
Fuente: Rev Diabetes Hoy
Gráfico: interempresas.net

jueves, 13 de noviembre de 2014

Neumonía: un riesgo evitable.

Las personas con diabetes, tienen una posibilidad tres veces mayor que el resto de las personas, de morir  como consecuencia de la gripe o la neumonía. Se calcula que solo un tercio de esas personas se dieron alguna vez, una simple y segura vacuna contra la neumonía.

Se recomienda la aplicación de esa vacuna, a cualquier persona de 2 o más años de edad que, debido a su edad, o a problemas de salud crónicos (como la diabetes), tenga mayores probabilidades de contraer neumonía. La vacuna contra la neumonía, también lo protege de otras infecciones causadas por la misma bacteria.

 Estos son algunos datos, para tener en cuenta los riesgos que enfrenta cualquier persona:

* 1 de cada 20 adultos que contraen neumonía (una infección pulmonar) muere.
* 2 de cada 10 adultos que contraen una infección sanguínea (bacteriemía) mueren.
* 3 de cada 10 adultos que contraen infección de las membranas que recubren el cerebro (meningitis) mueren.
* Alrededor de 10.000 personas mueren cada año debido a esas infecciones bacterianas. Sin embargo, vacunarse contra la neumonía brinda una protección de contraer esas enfermedades. De hecho, la vacuna tiene una efectividad del 60 % en la prevención de las neumonías más graves, la meningitis, la bacteriemia y la muerte.

La vacuna contra la neumonía se puede colocar en cualquier época del año. Para la mayoría de las personas, una sola aplicación es suficiente protección para toda la vida. Sin embargo, las personas menores de 65 años, que padecen alguna enfermedad crónica, o tienen el sistema inmunológico debilitado, deben consultar con su médico, si es necesario volver a vacunarse, después de 5 a 10 años de haberse vacunado por primera vez.
Fuente: Rev Diabetes Hoy.
Gráfico: es.slideshare.net

lunes, 10 de noviembre de 2014

Vacunas, un pasaporte a la salud (parte3)

Otras vacunas

Algunas vacunas que también son importantes en las personas con diabetes, son:

Antitetánica (tétanos): debe tener un refuerzo cada 10 años, o si se tiene alguna lesión, sobre todo en los pies. La recomendación, es reforzar con la vacuna doble bacteriana (contra tétanos y difteria) debiendo ser uno de estos refuerzos con la vacuna triple acelular (incluye componentes para bordetella).
Vacuna contra la varicela: si no ha tenido esta enfermedad anteriormente. En los adultos puede presentarse también como herpes zoster. Esta infección es especialmente severa y recurrente en las personas con diabetes.

Precauciones antes de la aplicación.

* Todas las vacunas tienen indicaciones y contraindicaciones. Hay que averiguar cuáles son las características de la vacuna que se va a aplicar, los efectos secundarios que puede tener y qué hacer en caso en que se presenten.

* Si se tiene alguna alergia, se le debe avisar al médico para que evalúe si se debe aplicar la vacuna.

* La mayoría de las vacunas se acompañan de dolor en la zona de aplicación que puede durar varios días. No hay que frotar la zona ni aplicar sustancias sobre ella.

* Algunas vacunas pueden causar elevaciones leves de la temperatura (menores a 38.3°C) que pueden controlarse fácilmente, no obstante, hay que consultar con el médico si debe tomar medicamentos en caso necesario.

* Hay que avisar al médico si se tiene fiebre alta, dolor importante en la zona de aplicación, cambios en el color de la piel, pus o alguna otra alteración.

* Hay que llevar un control sobre las vacunas que se aplican a lo largo de toda la vida: fecha, dosis, reacciones, etc.

Un esquema de vacunación completo es esencial para el cuidado de las personas con diabetes.
Fuente: Rev Diabetes Hoy
Gráfico: laconexionusa.com

viernes, 7 de noviembre de 2014

Vacunas, un pasaporte a la salud (parte2).

Vacunas indispensables.

Cumplir con el esquema de vacunas oficial es especialmente importante para las personas que integran los llamados grupos de riesgo, que tienen más probabilidades de contraer esas enfermedades o de desarrollar sus formas más graves. Las personas con diabetes, al igual que las que padecen afecciones cardiacas o pulmonares crónicas, integran esos grupos de riesgo. Los diabéticos deben cumplir el calendario de vacunación con mayor rigidez que una persona sin diabetes, ya que la diabetes no controlada altera los mecanismo de defensa del organismo.

* Vacunas contra la gripe:

Protege contra algunas de las variedades más frecuentes del virus de la influenza. Se sugiere aplicarla una vez al año durante el otoño. En general, una persona no debe recibir una vacuna antigripal si:
- Se tiene una alergia grave a los pollos, o a la proteína del huevo.
- Está con fiebre, o tiene una enfermedad que es algo más que un simple resfrío.
- Tuvo una mala reacción a un vacuna antigripal previa.

* Vacuna contra el neumococo:

El neumococo es una de las causas principales de neumonía. La neumonía es una forma de infección severa de las vías respiratorias. En las personas con diabetes una neumonía puede ser mucho más grave, de ahí que una de las vacunas recomendada sea la antineumocóccica, que protege contra el neumococo que causa, entre otras afecciones, neumonía. Hay dos tipos de vacunas, la polisacárida que se usa en adultos y la conjugada, que se usa en chicos. No evitan las infecciones, pero reducen las complicaciones y las internaciones. Los diabéticos deben recibir una segunda dosis a los cinco años de la primera.
Fuente: Rev Diabetes Hoy
Gráfico: contintanorte.com.ar

miércoles, 5 de noviembre de 2014

Vacunas, un pasaporte a la salud (parte1)

Las personas con diabetes suelen tener sus defensas debilitadas, esto puede provocar que las infecciones sean más severas y que el tiempo de recuperación sea más largo. Por eso, es tan importante mantener el esquema de vacunación al día. Las vacunas ayudan a evitar algunas enfermedades que son muy contagiosas y que pueden tener serias consecuencias para la salud.

Las vacunas están diseñadas para prevenir algunas enfermedades que son altamente contagiosas y que pueden tener serias consecuencias para la salud. En las personas que tienen diabetes, estas enfermedades pueden ser más severas que en otras personas, además de que causan descontrol de los niveles de glucosa y pueden tardar más tiempo en curarse. Por estas razones, existe un esquema de vacunación especial para personas con diabetes, que se debe completar lo más pronto posible. También se debe mantener este esquema vigente para dar una protección  adecuada.

No obstante, aunque se tenga la vacuna la persona puede contraer la enfermedad, porque las vacunas protegen de una infección severa, aunque a veces, se pueden presentar síntomas de una infección más leve.
Fuente: Rev Diabetes Hoy
Gráfico: informador.com.mx