Después de un mes de lucha con la PC, me atacaron los virus, fue tanto el desastre que hasta tuve que cambiar el rígido, por suerte, hoy después de mas de un mes, estoy nuevamente intentando escribir algo relacionado con la diabetes tipo 2, que es la enfermedad que tengo. En este tiempo de ausencia he tenido muchos altibajos, los fui superando de a poco, por suerte para mi y mi familia que son los que me acompañan en la lucha.
El 26 de agosto viajé a la Villa de Merlo, San Luis para estar cinco días en contacto con la naturaleza, viajar con todo mi equipo de diabético, bolsitas porta insulina, comprimidos antiglucemiantes, pulsera identificatoria como diabético, en fin todo lo necesario para estos casos, mi equipo de diabético, lo tuve siempre al alcance de la mano, especialmente durante el viaje, en el hotel tuve una dieta especial para diabéticos, muy buena. Las excursiones fueron siete en total todas seguidas casi nada de descanso, las caminatas entre las rocas y caminos con pendientes con inclinaciones de mucho respeto, no fueron barreras para un diabético, novecientos metros sobre el nivel del mar, luego 2200 metros sobre el nivel del mar, no importa siempre adelante, el control de la glucosa eran de 4 a 5 veces en el día. Excelente viaje, el contacto con la naturaleza fue muy bueno me hizo sentir vivo todo el tiempo y la diabetes fue solo una compañera de viaje. Todo bien.
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